La Caida.

En esta ocasión quisiera revivir una anécdota muy divertida espero se puedan acordar, estábamos en la clase de Microbiología o Biologia, bueno el hecho es que estábamos en esa clase con la maestra Machuca; como era costumbre siempre hasta la ultima fila nos sentábamos, de derecha a izquierda el Tolas (cuando iba), Raúl el “Gordo”, Javi el “Sida”, Berna “el Caballo” Yo Mero (su consejal) y Marco Canchola, a veces quedaba un espacio vació, el cual lo ocupaba el que quisiera, en esa ocasión el “Rostro” (que me da mucha pena no acordarme de su nombre) tomo su butaca y se sentó hasta atrás, recargando su banca en la pared y apoyado en dos patas (de la banca), y quedando entre el Gordo y yo Mero, bueno fue pasando la clase entre que la neuronas tienen su Núcleo alimentada por las vainas de mielina, así mismo los axones conectan al Nucleolo, las cuales crecen extendiendo sus dendritas, y todo esto es la unidad funcional y estructural del sistema nervioso que produce y trasmite el impulso nervioso etc.

Y como ustedes recordaran la voz de la maestra era por demás narcoleptica, entonces yo estaba dando una que otra cabeceada cuando el gordo me dijo con señas “fíjate” para eso el Rostro estaba pero si bien geton, con todo y lente oscuro, el Gordo se sentó a un lado del Rostro mientras la maestra escribía algo en el pizarrón, en eso pues me imagino que todo el salón estaba bajo los influjos de la voz hipnotizante del la maestra, porque todo el grupo realmente estaba poniendo atención o estaban casi en los brazos de Morfeo, en eso la maestra vuelve a escribir en el pizarrón, y el gordo jala la banca y esta se va hacia atrás ocasionado una estrepitosa y ruidosa caída, ya se imaginaran el crudo despertar del Rostro!!!, todo el grupo inmediatmante voltio hacia donde estaba el rostro, este pobre para acabarla, parecía tortuga ya que de espaldas y con la butaca atorada no se podía levantar, y nada mas manoteaba el ingenuo, como pudo salio de la banca y sin levantar esta ultima se fue a la banca siguiente, aquí lo sorprendente de la historia es que nadie se rió, después de mirar al Rostro todos voltearon la mirada hacia la Maestra Machuca, a la expectativa de lo que iba a suceder pero el temple de la maestra fue inmutable en cuanto el rostro se sentó de nuevo, continuo con el sistema nervioso central como si nada hubiera sucedido, este temple solo se comparo con el del Gordo que con una seriedad digna de un Oscar no gesticulo ni movió un ápice de su sonrisa, mientras yo estaba que me hacia pis por los sucesos.
Así ocurrieron las cosas.