Vallartazo

Después de nuestra pachanga de graduación, y con el dinero que teníamos destinado para el viaje se empacaron las maletas y todo mundo se subió al camión, y se fue a Vallarta, por mi parte me perdí ese viaje ya que ese lunes que fue la partida, yo me encontraba rumbo al Colegio del Aire para hacer mis exámenes de admisión a esta institución castrense, fueron dos días realmente pesados entre exámenes de aptitud física y académica, psicométricas y etc., pero bueno eso ya es intrascendente porque afortunadamente no soy militar, bueno pues yo me les uní hasta el miércoles y llegue después de las 10 de la noche, para mi buena suerte Lily estaba en su habitación, ya que todos (como era de esperarse) se fueron de reventón, y cuando llegaron pues ya me instale en el cuarto donde estaba la banda pesada, y para variar me toco suelo, bueno es muy drástico decirlo de esa manera, mas bien me toco colchon y en el suelo, aunque dejenme confesarles que siempre que me tocaba asi el colchon, por mas borracho que estuve nunca me caí de la cama, al día siguiente estuvo de lujo y aunque sino mal recuerdo éramos de 25 a 30 jóvenes entre bellas y bestias, todos estuvimos sino juntos por lo menos muy cercanos, recuerdo que en ese hotel en medio de la alberca había unas piedras enormes y claro que por supuesto con su respectivo letrero de “prohibido echarse clavados” y nosotros a duro y duro sacando agua que fue un contento, y hubo de todo, desde el clavado mas complejo hasta el que menos o mas agua sacara, y entra mas cerveza mas complejidad en los clavados, sinceramente creo que si en las olimpiadas dejaran pistear a los atletas, veríamos una serie de clavados fuera de este mundo!!, cuando nuestras espectadoras se aburrían de tanto derroche de agua y de clavados si iban a presumir sus monumentales físicos hacia la Playa, y ya se la saben a “caminar en la arena” nunca he entendido ese concepto de caminar en la playa, pero bueno cada quien, o si no el de escribir el nombre del novio, o del compa que les gusta, o ya de perdido el nombre propio, eso si !! con su respectiva foto para la posteridad, (Peor que lo anterior, menos lo entiendo) con el transcurso del día caía el sol pero no el animo, entre el sol, chelas y arena, pues siempre se despierta el instinto de supervivencia, y pues las tripas rugen en reclamo de algo sólido, porque de liquido ya había sido mucho, y aclarando siempre podrá ser mucho pero nunca demasiado, recuerdo que nos habían dado las habitaciones del ultimo piso y si necesitábamos algo simplemente “pasábamos” de un cuarto a otro por los balcones, y así recorríamos todos los cuartos en busca de alimento, mas tarde nos echamos un regaderazo y nos lanzamos al malecón, la verdad derrochábamos guapura, porque de por si uno carita y bronceado pues mas, después de pasear nuestra humanidad por el malecón decidimos entrar al Zoo (no se si todavía exista este lugar) pues yo creo éramos unos 15, y pues la verdad entre la bailada y la platicada transcurrió la noche sin novedad, algunos nos pusimos briaguillos (lo digo por mi) recuerdo que nos sentamos a seguir pisteando mientras la mayoría bailaba, y estábamos platicando el gordo, el Caballo y su servidor cuando el Gordo dijo oye!! Donde están todos?? Efectivamente miramos alrededor y ya no había nadie!!! El Gordo dijo déjame ver donde están, y salio del antro, en eso llego el mesero y nos dijo, le traigo la cuenta joven? Nos quedamos viendo Berna y yo, y respondí que si moviendo la cabeza, llego la cuenta y ándale que era una lanota , que tal vez en estos días es un consumo normal, pero en ese tiempo se “supone” que las niñas solo tomaban agua mineral, pero la cuenta decía lo contrario, en eso como el gordo se tardaba Berna dijo, déjame ver porque tardan tanto!! Y salio, yo me quede esperando un rato que se me hizo eternooo!!! Y pase por todas las fases de la borrachera, desde Hermandad: yo quiero a mis amigos, no creo que me dejen aquí, Enojo: malditos duendes!! Esta cabra de bolones porque tardan tanto!!, Sentimiento: si me dejaron abandonado aquí!! Es mas hasta cruda me dio en ese momento, pues la verdad no sabia que hacer porque pasaba el tiempo y nadie regresaba, así que me arme de valor y me dirigí hacia la entrada dispuesto a todo (ósea a correr como loco).

Continuara.